Dormir del lado derecho: efectos en tu salud que nadie te cuenta (y por qué deberías cambiar de lado)

Dormir bien no solo depende de cuántas horas pasas en la cama: la posición en la que duermes también puede influir profundamente en tu digestión, circulación y hasta tu sistema inmune. Y aunque muchos no lo saben, dormir siempre del lado derecho podría no ser la mejor idea. Aquí te cuento qué pasa en tu cuerpo cuando duermes de este lado 👇

⚠️ 1. Problemas digestivos
Dormir del lado derecho favorece el reflujo ácido.
¿Por qué? Porque el estómago queda más alto que el esófago, lo que permite que los ácidos gástricos suban más fácilmente. Esto puede causar acidez, malestar estomacal o agravar gastritis.

⚠️ 2. Más presión sobre el hígado
Tu hígado está en el lado derecho y es uno de los órganos más pesados. Si duermes sobre él, ejerces presión extra que podría afectar su funcionamiento con el tiempo y complicar procesos como la desintoxicación del cuerpo.

⚠️ 3. Impacta la circulación
Al dormir de lado derecho, el flujo sanguíneo de regreso al corazón puede ser más lento, especialmente en personas con problemas de circulación, varices o enfermedades cardiovasculares. Esto podría aumentar la hinchazón en piernas y pies.

⚠️ 4. Puede dificultar la respiración
Para algunas personas, dormir del lado derecho comprime ligeramente el pecho, lo que puede dificultar una respiración profunda. Si tienes asma, apnea del sueño o problemas respiratorios, esta posición podría empeorar los síntomas.

⚠️ 5. Menos drenaje linfático
El sistema linfático ayuda a eliminar toxinas. Dormir del lado derecho ralentiza el drenaje linfático, ya que la gravedad no favorece el flujo natural. Esto puede influir en la acumulación de toxinas y afectar tus defensas.

✅ ¿Cuál es la mejor opción?
Diversos estudios señalan que dormir del lado izquierdo puede ser más beneficioso para:
✔️ Reducir el reflujo y mejorar la digestión.
✔️ Favorecer la circulación sanguínea y linfática.
✔️ Dejar al hígado “descansar” sin presión directa.

💤 Pequeños cambios, grandes resultados
Si sueles dormir del lado derecho, prueba cambiar de lado poco a poco. Usa una almohada entre las piernas para mayor comodidad y adapta tu postura para lograr un sueño más reparador y saludable.

✨ Dormir bien es más que descansar: es cuidar tu salud desde la cama.